¿Vosotras/os también tenéis la sensación de que vamos siempre a contrareloj?
Nuestra sociedad va demasiado deprisa, casi todo se mide por tiempo. Podemos comprar un libro y tenerlo en 24 horas, comida y tenerla en casa en media hora, alquilar un Ferrari y probarlo en minutos, acceder a la información en microsegundos… y todo esto ha hecho que la PACIENCIA escasee. Y mucho.
Tomarse un café hoy en día sin “esperar o exigir” que el camarero te atienda de forma instantánea es casi imposible en nuestra mente. Vamos a contrarreloj, hasta para disfrutar de un café con un amigo.
Estoy aquí, para decirte que tengas PACIENCIA, que intentes vivir en el presente, y disfrutarlo sin prisa. Que si tu perro está enfermo y con su tratamiento veterinario no mejora, quizás pueda haber algo detrás de origen emocional. Algo que no se solucionará de un día para otro.
Estoy aquí para decirte que si estás probando un remedio natural (resalto la palabra NATURAL) no busques la inmediatez porque generalmente necesitamos CONSTANCIA y TIEMPO (ojo, que a veces ocurre, que vemos mejoras en poco tiempo).
Muchos tiran la toalla el primer mes de ofrecerle al animal algo natural. Pero es que así hacemos con todo: el primer mes de gimnasio, el primer mes de meditación, de un cambio alimentario… podría poner cientos de ejemplos, pero lo que vengo a decirte es que trabajes tu mente y que ayudes a tu peludo de verdad.
Resumiendo, tenemos que trabajar la paciencia y la constancia. Tanto por nuestro bien como por el de nuestros peludos. Al final es todo una cuestión de salud.
Cómo trabajar la paciencia y la constancia.
No me gusta dar consejos generales, porque a cada uno le funciona una cosa. Pero hay una cosa que sí recomiendo, y es la MEDITACIÓN o Mindfulness. Ésta te ayudará a tener foco, claridad y constancia.
Para meditar no tienes por qué sentarte media hora cada día, a veces ponerte a leer, pintar, bailar, tejer o cualquier tarea que te haga concentrarte y estar presente es una buena meditación. Y si prefieres sentarte o tumbarte a meditar, no hace falta que empieces haciéndolo media hora, con unos minutos cada día es suficiente. Tienes muchas aplicaciones que te ayudan a hacer esto, con meditaciones guiadas, música, temporizadores…
La meditación hará que pares, respires, estés en el presente y por lo tanto ya no irás tanto en “piloto automático”, tendrás más paciencia, más consciencia sobre tu cuerpo, sobre tu mente y obviamente, sobre tu entorno, tu peludo.
Si eres de los que te gusta leer te recomiendo “Silencio: el poder de la quietud en un mundo ruidoso” de Thich Nhat Hanh, en el que habla precisamente de hacer pequeñas paradas durante el día y simplemente respirar.
Si estar parado te cuesta, el yoga es un buen apoyo a la meditación, o como te comenté hace unos párrafos pintar o bailar también pueden ser actividades de meditación, siempre y cuando estés presente en la actividad (sin pensar).
Algunas flores de Bach pueden ayudarte a disminuir la tensión nerviosa y centrarte en lo importante. Te dejo el link a La mezcla Agobios. Una mezcla floral creada precisamente para esto, tanto para humanos como animales.
¿Por qué los remedios naturales necesitan más tiempo?
Los remedios naturales no son químicos (aunque recordemos que muchos químicos, como la aspirina, vienen de una planta. Pero de eso podemos hablar otro día. Por esta razón, la mayoría de las veces su tiempo de actuación es más lento. ¡Como la vida misma! Como la naturaleza o el árbol del que hablamos al principio de este blog, que no crece de un día para otro.
Las flores de Bach, por ejemplo, en los casos crónicos, requieren tiempo y observación por nuestra parte. No podemos pretender que un animal que tiene problemas de relación con sus congéneres, o que le cuesta quedarse solo en casa, mejore notablemente en una semana. ¡Ojalá!
Normalmente se necesita tiempo, dedicación y frecuentemente acompañarlo de un cambio de rutinas y/o otras terapias (educación canina/ felina, nutrición, u otro tipo de terapias energéticas). Cualquier cambio sutil puede ser un gran avance.
Por eso además de la paciencia, necesitamos ser constantes. Tanto el ser humano como los animales NECESITAMOS CREAR HÁBITOS. Sobra decir, buenos hábitos. Y lo mejor de todo, la constancia tiene una gran RECOMPENSA: EL BIENESTAR, tanto físico como psicológico.
¿Te atreves a analizar tu vida y la de tu peludo?
Agenda una asesoría y veremos juntas posibles mejoras.